Cinco cosas de cuarenta mil que hacen pensar que tu vida es divertida.
1. Voy a un lavado de carros. Pido: -Lavado completo póngale Lonol. – Bien lo quiere con Almorol me dice ella y yo - Sí con eso. (What in the world)
2. Estoy en Londres, me siento soñada caminando por el puente Millenuim, el cual entre otras cosas tiene la anéctodota de ser destruido en la pelícual de Harry Potter. Voy caminando con mi paragüas, y debido al aire se hace hacia arriba. ( Este mm este mmm mejor lo tiro)
3. Abro una casa con mis llaves pienso -¡Nos robaron! Camino hacia atrás porque algo no estaba bien y era una casa antes que la mía. (Ok nadie vio, vámonos).
4. Voy manejando, en la carretera para mi trabajo; hace aire. Veo algo extraño en el retrovisor, algo obscuro. -¿Qué es eso? --Oh, oh. Se levanta la caja de plástico que cubre la caja de mi camioneta. Mejor me orillo. –Ups sale volando, y pasa un trailer por encima de ella (What the ...)
5. Por veinteaba vez se me quedan las llaves pegadas en la camioneta. Lo bueno es que traigo una cuchara (Ni la pluma, ni la tarjeta las encontré), abro en esta ocasión la ventanita por la cual meto la mitad de mi cuerpo para despegarlas. (One more time)
La vida simplemente es divertida.
Si que son buenas historias!!.... pero aun asi me da la impresion que son las mas "trankilas " cuantanos las del archivo secreto , tipo las de (reserva especial yolanda) , en una de esas me imagino que has te tener unas experiencias tipo Forest Gump en donde te han de pasar un chorro de cosas.
ResponderBorrarplease cuentanos que mas sobre casos de tu niñez, porque esas si han de ser muy buenas!!!
Eres sencillamente genial. Genial, genial.
ResponderBorrarjajajaja gracias a ambos por sus comentarios. Pues mira anónimo de la niñez la verdad que no tengo muchas travesuras. Anécdotas y si las hay tendría que cosultarla bien con mi papá porque memoria tengo poca :S pero veré que puedo hurgar.
ResponderBorrarQue linda Xitlally por tus comentario.
Yolanda.
ResponderBorrarLeí El sabor del Agua hace unos meses, y tengo que decirte que lo disfruté muchísimo. Me reí a carcajada suelta, me angustié, pude ver y oír a los personajes, recorrer las calles que ellos recorrían. ...
¡Me encantó saborear la cotidanidad! Hace falta eso... escribir sobre la belleza de lo cotidiano.
Gracias por motivarme a escribir.
Saludos!!!!